Bienvenida/o a mi blog

¡Hola querido lector/a!




Ante todo quería agradecerte tu presencia en mi mundo lejano. Tan solo espero que disfrutes de la lectura. Pero antes, una breve introducción.


Sabrás que es el amor, ¿verdad? No son solo mariposas en el estómago. Y a veces, no son mariposas. Es dolor, angustia, tristeza, aislamiento, temor... pero no siempre. Y ese sentimiento que le da a la vida un toque agridulce, es tan indispensable para vivir como el aire. Es lo que trato de plasmar en cada línea. Si, se sufre y mucho, pero a veces tenemos que sufrir para lograr un objetivo.


Por ejemplo, un escalador tiene que pasar hasta días de frío, hielo, dolor, viento, nieve... para alcanzar la cima de la montaña más grande del mundo, y poder ver una de las vistas mas bellas. Nosotros tenemos igualmente que sufrir para alcanzar a esa persona deseada, a la persona idónea. Pero, una vez alcanzada, se disfrutan de las vistas más bellas de la vida.


Personalmente, después de mucho frio, nieve y algun que otro desprendimiento de rocas, he logrado llegar a la cima. Por ello, te dejo con las huellas que dejé en el camino, y con las vistas que tengo desde esta cima tan hermosa de la vida.




¡Bienvenida/o a la aventura!



Cordialmente



Raúl

miércoles, 11 de mayo de 2011

Carta Sin Remite

Hola:

Si, soy yo. Y no, no vengo a molestarte, como siempre suelo hacer cuando has cometido algún error. Solo quiero que te pares a pensar durante unos segundos. Recuerda. Hace unos años. ¿Cuántas veces, aquí en tu cuarto, has estado mirando en la ventana, como caía la lluvia, o como la gente caminaba dando un paseo, mientras tu cara se convertía en un río triste y sin control? Dime, ¿cuántas veces he intentado hacerte pensar que esos momentos pasarían pronto, y que la vida te tenía guardado algo? Si, ya se que es muy fácil decirlo, pero ya sabes quien soy, y que, por lo general, siempre suelo llevar razón. ¿Por qué no me hiciste caso? ¿Por qué pensabas que estabas condenado a vivir atado a una rueda de molino? ¿Por qué te has tenido siempre en tan baja estima? ¿Por qué permitiste que esas personas influyeran tanto en tu mente, que dejaste que la moldearan cuan barro? Menos mal que estaba ahí. Recordándote siempre que no era así. Que no importaba lo que pensaran los demás. Es triste que alguna que otra indeseable te haya utilizado. Pero, amigo, la vida es así, y de errores se aprende. Y tu aprendiste, ya lo creo que si. Por más que te insistía que no tomaras un camino, tú, insensato testarudo, lo tomabas. Pero no podía hacer nada, solo avisarte. Y luego venían las noches en vela. Y mi voz, de fondo, susurrándote “Ya te lo advertí”. Has sufrido mucho. Pero ese sufrimiento te ha servido para algo. Te ha servido para aprender. Y, aunque después seguiste errando, y sigues haciéndolo, poco a poco has ido caminando algo más firme y seguro.

Y ahora, mírate. Has llegado a la meta. Siempre pensando que nunca llegaría. Y cuantas veces te dije, como te mencioné antes, que la vida nos depara siempre algo bueno. Dime, ¿qué ves? Un corazón que camina junto al tuyo. ¡Y menudo corazón! Yo también creo que es el mejor que tú y yo hemos visto en la vida. Has encontrado un corazón puro, limpio, sin maldad, con mucho amor, y con muchas heridas de guerra, como el tuyo. Ese corazón lo gobierna un alma con las mismas características. Un alma transparente, un alma casta, madura, sensible. Un alma con mucha sensatez. Más de una ocasión te he oído decir que es un ángel, y la verdad, yo también lo creo. Pero quiero que pienses un momento. Esto es nuevo para ti. Y tienes que andar con cuidado. Esa persona no merece que sufra por ti. Y es lo que quiero que tengas siempre en mente. Tienes que dar lo mejor de ti, amigo. Siempre lo mejor, para ella. Para que la hagas feliz. Ese es tu deber, hacerla feliz. Y si no cumples con ello, ahí voy a estar yo, molestándote siempre, para que corrijas el rumbo y vayas por donde debes ir. Tienes que cuidarla, respetarla y, por supuesto, amarla. Imagina que en tus manos portas un jarrón valioso, único en el mundo. ¿Verdad que andarías con cuidado? Pues esta es una situación parecida. Trátala con delicadeza, con cariño. Si así lo haces, obtendrás muchas bendiciones. Ella ya de por sí es una bendición. Y, creeme amigo, era algo que la vida os debía a los dos. Sobre todo a ella. Tanto sufrimiento no es justo. En tus manos está el que sus días sean mejores. Y ahí voy a estar yo, ayudándote en lo que me sea posible. Pero, por favor, al menos escúchame. Sé que algunas veces no me harás caso, y creeme, lo comprendo. Pero al menos, ten en cuenta lo que te diga siempre. Te ayudará. Cómo cuando te dije que tendrías que tener paciencia. Me alegra que hayas seguido mi consejo.

La vida da muchas vueltas. Y tú has visto como la tuya ha cambiado. Y, por una vez, a cambiado para bien. Se acerca una etapa muy importante en tu vida. No la desaproveches. Un ángel hay delante en tu camino. Y está dispuesta a caminarlo contigo. Dime, ¿no es motivo suficiente para darle todo el cariño y amor que se merece?


Pues así debes hacer. Luchad, y juntos, ganareis la batalla. Y espero ese día poder susurrarte en tu mente “¿Ves? Ya te dije que todo saldría bien”.

Esperaré paciente ese día.


Atentamente



Tu conciencia.

1 comentario:

Unknown dijo...

Simplemente precioso ojalá sea el ángel (a ratos diablillo) que tanto has buscado y que tanto te mereces.